Avinguda Antic Regne de València, una hora más allá de la medianoche.
Tres personas sentadas en un banco, con botellas a su alrededor.
Omar: Tíos, no vuelvo a quedar un sábado si juega el Valencia. Porque salir de mala leche pa qué.
Glaucón: Mejor, así bebes más.
Lola: Y nosotros menos, Glau. No compensa. Pásame el vodka.
Omar: No, no, ni bebiendo. Esto ya no tiene cura. Bueno, sí, pero para eso se tendría que ir el puto cerdo que...
Lola desconecta mientras los varones hablan de fútbol. Juguetea con el móvil justo cuando se oye el característico sonido de un mensaje recibido.
Lola: Chicos, Sonia que dónde estamos. ¿Le digo que venga aquí o vamos a algún lado?
Glaucón: Que venga mejor, por lo menos hasta que nos pulamos el alcohol, luego ya vamos a donde sea.
Omar (sigue): ... porque además es que los otros se contagian y al final ya no juega bien nadie, y claro, viene el Villarreal y te enchufa...
Lola mira, sin escuchar, a su amigo. Es capaz de lanzar un discurso futbolístico mientras lía un canuto sin dejar de mirarles alternativamente. Es atractivo. Tiene el pelo largo y las facciones duras; en unos años se convertirá en el clásico protagonista masculino de una telenovela mexicana. Su forma de vestir y de pensar, no obstante, parecen alejarle de una, de otro modo, ajetreada vida sentimental.
Glaucón: ¡Lola! ¿No me escuchas? ¿Se ha terminado la Fanta de limón?
Lola: No, no, aún queda; toma.
Omar: Eh, échame, Lola que se me seca la garganta.
Lola: Normal, si con lo que hablas podrías ser tú el presidente.
Omar: Si yo fuera el presidente, lo que le han hecho a los capitanes no lo habría consentido, y mucho menos de esa forma inhumana y traicionera.
Lola: Es verdad, algo leí. No me pareció bien.
Glaucón: Ni a nadie. Es que les tienen apartados y todo.
Lola: Oye, ¿y eso no se considera mobbing?
En ese momento llega Sonia, con una minifalda de anticonstitucional longitud.
Sonia: ¡Eh chicos! ¿Qué hacéis? ¿Dónde está mi cubatilla?
Lola: Sonia, se te va a helar el chocho.
Glaucón: ¡Déjala, déjala que vaya como quiera!
Sonia: Jajaja. No os preocupéis que a alguien encontraré para darle calor.
Omar: ¿No viene tu novio?
Sonia: ¿Toni? No, no.
Sonia contesta con forzada naturalidad y cambia rápidamente de tema. Lola siente algo extraño y la convoca a un aparte.
Lola: ¿Pasa algo con Toni?
Sonia: Ay, tía, creo que lo voy a dejar.
Lola: ¿¡Ya!? ¡No puede ser!
Sonia: Sí, sí puede. ¿No viste cómo te miraba en Nochevieja? No llego a estar yo y te entra.
Lola: Pero tía qué dices.
Sonia: Que sí, que es un salido. Se ha cansado de mí y ahora va a por otra jovencita.
Lola: Pero, ¿cuántos años tiene?
Sonia: Veintitrés. Y mira que está bueno, ¿eh? Pero da igual, paso de él.
Lola: Tú verás. Tampoco creo que te afecte demasiado, en realidad.
Vuelven con los dos. Ahora es Glaucón el que parece haber tomado parte activa en la conversación.
Sonia: Pero, ¿de qué hablan?
Glaucón: ¡De fútbol!
Sonia (con cara de asco): ¿De fútbol?
Lola: Es el gen.
Glaucón: Lola nos echa la bronca cada vez que hablamos de fútbol.
Lola: Que es siempre.
Sonia: No me extraña.
Omar: No me digas que no te gusta el fútbol.
Sonia: Lo justo, pero no un sábado por la noche, cielo.
Glaucón: Es que acaba de jugar el Valencia.
Sonia: Ah, yo es que soy del Barça.
Omar: ¿Sí? ¿Qué piensas de la cesión de Pinto?
Sonia: ¿Quinto? ¿Quién es ese?
Glaucón: Pinto. Para cubrir la baja de Jorquera.
Sonia: ¿Jorquera? ¿Juega en el Barça? Definitivamente no me gusta el fútbol.
Ríen. Siguen bebiendo.
Lola: ¿Ese que habéis dicho es el que se lesionó en el Euskadi-Catalunya?
Sonia: ¿Pero no decís que es del Barça?
Omar: No, pero era un amistoso con la selección.
Sonia: ¿Catalana?
Glaucón: Sí, Jorquera. ¿Por qué lo dices?
Lola: Es que me acuerdo del presidente del Barça todo indignado cuando sus jugadores iban convocados con España, cargando contra la Federación en virtud de los riesgos que corrían solo por jugar un simple amistoso. ¿Dijo algo del portero este?
Omar: Jeje, no. ¿No ves que es independentista? Como se lesionó con Catalonia, se calló como una puta.
Lola: Pues vaya. Entonces le da igual que los jugadores se lesionen o no. Lo que le pica es que jueguen con su denostada España.
Glaucón: ¡Eh, tú no digas! Bien contenta que estabas hace dos veranos con el Mundial.
Lola: No, si yo no defiendo a nadie. Pero me parece ridículo lo de este tipo, ¿por qué no es más claro? Si ya todos sabemos de qué pie cojea.
Glaucón: Pero, Lola. ¿¡Estás hablando de fútbol!?
Lola: No.
Avinguda Antic Regne de València, hora y media más allá de la medianoche.
Cuatro personas en torno a un banco, con botellas a su alrededor.
Un clásico vapuleado, el salmorejo
Hace 2 semanas
10 comentarios:
Mmmmmmmmmm,
enyore eixos carrers.
La cotidianidad es todo, es lo que hay...
Solo hay un tema en literatura, la vida. Y la vida se vive...
;)
Lola ya no sabía cómo hacer suya la conversación. Y acabó llevándolos a su terreno.....sutilmente. jeje
Jojo, me encantan estas conversaciones que captamos a lo GH urbano. xDDD
Glaucon y cia... a la próxima que salgan sin ver el partido del VCF (jajaja)
Aunque suele ser peor, salir y no ver el partido, xq a la mínima intentas averiguar que paso... y entonces las chicas te miran y piensan "¡¡Fanatico!!" LOL
Vaya! que fácil es sentirse asi en una de esas calles. jajaja Muy buena imagen de un sábado nocturno en Valencia!
Gracias por tu comentario, me has hecho reír. Es posible que el reloj ese esté llamado... y no se le puede parar?
Un beso y una sonrisa.
sencillamente muy bueno...
la "minifalda de anticonstitucional longitud." me ha conquistado.
XD
XDDD lola me cae bien... XDDD gracias por tu coment.. salu2!
Odio cuando la gente se pone a hablar de fútbol. Pero yo no soy tan sutil (ni tengo tanta paciencia) y la conversación termina cuando ya se han cansado de hablar y yo he desconectado xD
El que mas me ha gustado hasta ahora.
Si le dan la ocasión Pinto se lucirá xDDD
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